Mayor riesgo de muerte entre las personas con enfermedad de Parkinson que toman antipsicóticos.

Investigadores estadounidenses encuentran que existe mayor riesgo de muerte entre las personas con enfermedad de Parkinson que usan antipsicóticos. El riesgo varía según el tipo de antipsicótico. Recomiendan su uso entre los enfermos de párkinson solo después de haber explorado todas las otras vías alternativas para el manejo de la psicosis.

discinesias en la enfermedad de Parkinson

Tanto como el 60% de las personas con párkinson experimentan síntomas psicóticos durante la evolución de la enfermedad. La psicosis se presenta generalmente en forma de alucinaciones y delirios. Los síntomas psicóticos se asocian en la enfermedad de Parkinson a la demencia o a cuando la enfermedad ya está muy avanzada. Pero, la realidad es que los síntomas psicóticos pueden presentarse en las primeras fases del párkinson y como causa, no solo se habla del propio avance de la enfermedad, sino, además, del efecto de los fármacos usados para tratar los síntomas motores.

En el tratamiento de los síntomas psicóticos lo común es que se receten fármacos antipsicóticos, como la quetiapina, a pesar de que existen varias advertencias sobre su uso en las personas mayores y aquellas con demencia, debido a que se han asociado a mayor riesgo de muerte. En el caso de la enfermedad de Parkinson, ya se los ha vinculado a mayor riesgo de muerte y al empeoramiento de los síntomas motores.

Recientemente, un grupo de científicos de varios centros de investigación estadounidense publicaron en la revista JAMA Neurology los resultados de un estudio en el que encontraron, nuevamente, que el uso de fármacos antipsicóticos incrementa la mortalidad entre los enfermos de párkinson.

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Riesgo de muerte hasta 50% mayor.

Mayor riesgo de muerte entre las personas con enfermedad de Parkinson

Para analizar la posible influencia de los fármacos antipsicóticos en el riesgo de muerte, los investigadores analizaron a 7877 personas con párkinson que formaban parte de la base de datos de Asuntos de Veteranos de EE.UU y a las cuales se les prescribió antipsicóticos. Cada una de estas personas fue “emparejada” con otro enfermo de párkinson de igual género, edad y fase de la enfermedad, pero a al que no se le había recetado medicación antipsicótica.

Al comparar ambos grupos, los resultados son poco menos que preocupantes: después de transcurridos 180 días de la primera toma de antipsicóticos, la mortalidad en ese grupo fue mucho mayor. En general, los enfermos de párkinson que toman antipsicóticos tienen 2.35 veces la mortalidad de los que no los toman.

Pero donde los resultados se vuelven claramente alarmantes es al analizar la mortalidad teniendo en cuenta el tipo de antipsicótico usado.  Si para los que tomaron quetiapina el riesgo de muerte era 2.16 veces mayor, para los que tomaron risperidona fue de 2.46, pero ya para el haloperidol, un antipsicótico convencional que lleva décadas en el mercado, el riesgo de muerte fue 5.08 veces mayor. Este último dato significa que los que usan haloperidol tienen un 50% más de probabilidades de morir que las personas que toman antipsicóticos atípicos, como la quetiapina.

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Si existen síntomas psicóticos ¿Qué hacer?

mayor riesgo de muerte entre las personas con enfermedad de Parkinson

La realidad es que los síntomas psicóticos existen y representan un problema mayor para el enfermo y su familia ¿Qué hacer entonces para tratar los síntomas? En primer lugar, lo evidente: precaución. Según uno de los autores de la investigación, el Dr. Daniel Weintraub, citado en un comunicado de prensa de la Universidad de Pennsylvania:

Creo que los antipsicóticos no deben ser prescritos a los pacientes de Parkinson sin una cuidadosa consideración.

Y añade:

El tratamiento con antipsicóticos debe reservarse para aquellos casos en que los beneficios superan los riesgos.

Los autores consideran que se debe recetar antipsicóticos solo después de considerar todas las posibles vías de gestión de los síntomas sin estos fármacos, como la reducción de la medicación dopaminérgica. Y otra de las firmantes de la publicación, la Dra.  Helen C. Kales, agrega:

 Los médicos realmente necesitan evaluar si la psicosis es en realidad una ‘amenaza’ a la salud / seguridad de la persona con párkinson o los que le rodean. Si no es así, se debe utilizar otras modalidades, incluyendo la educación familiar y modificaciones del comportamiento y ambientales.

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En la actualidad, la compañía biofarmacéutica estadounidense Acadia ha solicitado a la FDA la aprobación para sacar al mercado un fármaco diseñado específicamente para tratar la psicosis en las personas con párkinson. El fármaco, denominado pimavanserina, disminuyó hasta en 37% los síntomas de psicosis en las personas con párkinson en las que se ha probado.

Referencias

University of Pennsylvania (2013). Antipsychotic drugs linked to increased mortality among Parkinson’s disease patients. University of Pennsylvania. Disponible en http://www.uphs.upenn.edu/news/News_Releases/2016/03/weintraub/

Weintraub, D. (2016). Antipsychotic use and mortality risk in Parkinson disease. JAMA Neurology. doi:10.1001/jamaneurol.2016.0031

Redacción TiTi