Tipos de memoria y problemas frecuentes con este proceso


¿Tienes una mala memoria? ¿Segura/o? Porque existen varios tipos de memoria y tal vez no eres tan olvidadiza/o como crees. La memoria va desde recordar por apenas segundos el resultado de una suma a no olvidar jamás el día que te sucedió lo mejor de tu vida.

tipos de memoria

Las facultades cognitivas del ser humanos son aquellas que le permiten conocer la realidad y procesar en diferentes grados de complejidad la información proveniente de ella.

Un de esas facultades es la memoria, de la que mucho se habla por sus implicaciones en muchos ámbitos de nuestra vida, como el aprendizaje.

Pero seguramente te has dado cuenta que algunas cosas las retienes en tu memoria por poco tiempo, mientras otras te acompañan durante toda la vida. Eso es así porque existen diferentes tipos de memoria.

La descripción más conocida de los tipos de memoria corresponde al llamado modelo estructural, que fue propuesto por Atkinson y Shiffrin en 1968.

En el modelo estructural de la memoria se habla de la existencia de tres almacenes o estructuras de memoria que son diferentes entre sí, pero trabajan de una manera secuencial y estructurada.

Esas estructuras son la memoria sensorial, la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo. En este modelo se incluyó posteriormente la conceptualización de memoria operativa o de trabajo (working memory) que lo hace más completo.

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Tipos de memoria humana

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Memoria sensorial

La llamada memoria sensorial almacena información que es captada por los sentidos. Esta información tiene un gran nivel de exactitud, sin embargo, se retiene por muy poco tiempo.

En dependencia del sentido del que provenga el recuerdo, estaríamos hablando de memoria icónica (imágenes visuales), ecoica (sonidos) o háptica (estímulos táctiles).

Memoria a corto plazo

La memoria a corto plazo contiene un pequeño cúmulo de información de la que somos conscientes en el momento presente. Tiene una duración de 30 a 45 segundos, pasados los cuales es necesario repetir verbalmente la información para que se mantenga activa.

Una cosa curiosa es que esta memoria opera de una manera sonora, incluso cuando se trata de recordar imágenes.

Memoria de trabajo

La noción de memoria de trabajo se elaboró con posterioridad a las primeras formulaciones del modelo estructural de la memoria. Es un tipo de memoria a corto plazo, pero con sus peculiaridades.

Al hablar de memoria de trabajo no solo hablamos de información que se recupera y/o almacena durante un corto periodo de tiempo, sino de información que debemos retener y manipular en ese corto tiempo para la realización de diversas tareas, como por ejemplo, la resolución de un problema matemático.

Memoria a largo plazo

Esta es la que personas por lo general identifican con la memoria en el sentido más cotidiano de la palabra. Almacena grandes cantidades de información y lo hace durante extensos períodos de tiempo.

Existen dos tipos de memoria a largo plazo. Esas son:

Memoria explícita

Corresponde a la memoria de información que guardamos y recuperamos durante largos periodos de tiempo, muchas veces durante toda la vida. A su vez en la memoria explícita se pueden distinguir dos tipos:

  • Memoria episódica: hace referencia a la memoria autobiográfica, es decir, al almacenamiento y recuperación de información relacionada con sucesos y situaciones enmarcadas en tiempo y lugar. Por ejemplo, el día de tu boda o el bautizo de tu hija.
  • Memoria semántica: ¿Qué es un perro? ¿Cómo se llama el presidente de España? ¿Quién escribió “100 años de soledad”? Pues ese tipo de información, más abstracta, corresponde a la memoria semántica.

Memoria implícita o procedimental

10 años sin montar una bici y, cuando lo vuelves a hacer, ¡magia! Lo haces tan bien como cuando tenías 13 años. Eso agradécelo a la memoria implícita, que almacena y recupera información de una forma un poco consciente y automática.

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Problemas de memoria comunes

A la hora de hablar de afectaciones de la memoria es importante tener en cuenta que algunos problemas son secundarios a otras condiciones, por ejemplo el alcoholismo, la deficiencia de vitaminas, lo tumores cerebrales o la las infecciones.

En este caso tratando las causas primarias pueden ser revertidos los problemas de memoria, al menos en la mayoría de los casos.

Otra cuestión serían las personas afectadas por el llamado deterioro cognitivo leve de tipo amnésico, donde la afectación de la memoria no llega a afectar el funcionamiento cotidiano, pero sí genera quejas por parte de la persona.

El deterioro cognitivo leve es más común que surja en las personas adultas mayores. En ellos esta condición representa un riesgo elevado de terminar desarrollando enfermedades que cursan con demencia, como la enfermedad de Alzheimer.

Pero en la mayoría de los casos una mala memoria solo será el resultado del estrés, la ansiedad, la falta de atención o simplemente que no se ha entrenado lo suficiente.

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Referencias bibliográficas.

Kenneth l. Higbee (1996): Your memory.  How It Works and how to Improve It. Marlowe & Company.

La mala memoria: reconozca cuando debe pedir ayuda. Disponible en https://www.nia.nih.gov/espanol/publicaciones/mala-memoria

Melina R. Uncapher, Monica K. Thieu y Anthony D. Wagner (2016): Media multitasking and memory: Differences in working memory and long-term memory. Disponible en https://link.springer.com/article/10.3758/s13423-015-0907-3