Delirium tremens: una complicación en pacientes alcohólicos


Aquellos pacientes alcohólicos que terminan de consumir de manera abrupta pueden desarrollar un síndrome potencialmente mortal llamado delirium tremens.

delirium tremens

La adicción a sustancias externas al organismo involucra mecanismos físicos y psicológicos altamente complejos, y la principal consecuencia de este proceso son los cambios neuronales tanto anatómicos como funcionales en diversos circuitos nerviosos especializados.

El delirium tremens es una patología que representa el peor grado de complicación del síndrome de abstinencia en alcohólicos, caracterizados por alteraciones psicomotoras y trastornos hidroelectrolíticos. Es sobre estas particularidades de lo que hablaremos a continuación.

¿Qué es el delirium tremens?

Es la complicación más grave del síndrome de abstinencia que se produce en los pacientes alcohólicos que terminan de consumir dicha sustancia de manera abrupta. Esto causa una serie de alteraciones fisiológicas que muchas veces son de difícil manejo.

Entre estos trastornos se encuentran las alteraciones en los fluidos y electrolitos (sustancias muy pequeñas que mantienen el equilibrio de volumen en las células), y pueden ser desencadenados por situaciones de estrés intenso concomitante como traumatismos o intervenciones quirúrgicas recientes.

¿Qué es el síndrome de abstinencia?

Es la respuesta del organismo ante el cese de la administración de una sustancia exógena que fue consumida de manera crónica a lo largo del tiempo. Este fenómeno se relaciona con la activación de una serie de vías nerviosas complejas y la liberación de neurotransmisores específicos.

Esto puede ser causado por una amplia variedad de sustancias, entre ellas el tabaco, ciertas drogas y el alcohol. Independientemente de la causa, los síntomas pueden abarcar temblor, escalofríos y cefalea intensa de localización difusa.

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¿Cuáles son los síntomas del delirium tremens?

El espectro de manifestaciones clínicas de esta entidad abarca una amplia variedad de trastornos neurológicos. Las alteraciones más importantes incluyen problemas en la orientación, paranoia y alucinaciones (que pueden abarcar varios sistemas sensoriales, pero el más común es el visual).

El momento de presentación suele ser a partir de las 48 horas posterior al cese del consumo de alcohol, a pesar de que puede durar alrededor de 5 días.

Existen lesiones cerebrales asociadas

El análisis histopatológico de las muestras obtenidas de estos pacientes muestra una importante atrofia cerebral , un proceso patológico a través del cual disminuye la cantidad de células funcionales en una determinada área del tejido cerebral.

Existen otras lesiones que pueden aumentar el riesgo de sufrir esta enfermedad. Estudios realizados en decenas de pacientes alcohólicos han demostrado que el ancho de las fisuras de los hemisferios cerebrales (los espacios que dividen cada una de las regiones del cerebro) se encuentra aumentado, relacionándose con un aumento de la incidencia de sufrir esta condición.

¿Se puede tratar esta enfermedad?

Antiguamente, esta condición se asociaba a una alta morbimortalidad por no contar con los recursos necesarios para tratar a los pacientes. De hecho, actualmente se considera un reto terapéutico y generalmente se utilizan medicamentos que actúan como depresores del sistema nervioso central.



El tratamiento integral abarca la sedación del paciente y la atención a los otros trastornos asociados, incluyendo alteraciones hidroelectrolíticas propias del consumo de etanol y el déficit de vitaminas, que muchas veces se asocian a otros síndromes neurológicos más específicos.

Fuentes y referencias

Saunders J, et al. Delirium tremens: su etiología, historia natural y tratamiento. RET, Revista de Toxicomanías. Nº 36 – 2003.

Diego J. Pereira