La estimulación magnética transcraneal en la esclerosis múltiple parece reportar algo de alivio sobre los síntomas de fatiga, aunque el área estimulada es clave para obtener resultados favorables. Esta tecnología lleva algo más de tres años aprobada en Europa.
Existen fármaco en la esclerosis múltiple (EM) para ayudar a controlar los síntomas de un brote o recaída, hay fármacos para prevenir precisamente la ocurrencia de brotes, los más avanzados hasta parecen ayudar a controlar la atrofia cerebral que experimentan las personas con EM primaria.
Hay fármacos para muchas cosas, sin embargo, la fatiga sigue siendo uno de los principales síntomas de la enfermedad para el cual las opciones de tratamiento son más que escasas.
¿Podría la estimulación magnética transcraneal profunda ayudar a aliviar los síntomas de fatiga? Según una investigación reciente, publicada en la revista Neurol Neuroimmunol Neuroinflamm, sí.
Los resultados no sorprenden, sobre todo teniendo en cuenta el cúmulo de investigaciones previas que apuntan a que la estimulación magnética transcraneal puede ayudar a manejar síntomas como la fatiga, pero también la espasticidad o la incontinencia urinaria.
Sin embargo, el tipo de estimulación magnética transcraneal usada en esos estudios previos se diferencia de la usada en la investigación más reciente. Ya verás por qué.
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¿Qué es la estimulación magnética transcraneal profunda?
Es una tecnología de neuroestimulación no invasiva que se diferencia de la tecnología previa, considerada como estimulación superficial, en los niveles de profundidad que puede alcanzar, hasta 3 veces más.
Una sesión de estimulación magnética transcraneal profunda implica la colocación de un casco en la cabeza que va conectado a un equipo donde el profesional a cargo determinará todos los parámetros de la sesión: tiempo, frecuencia, número de estimulaciones, etc.
Es una técnica indolora y en general considerada segura, aunque su aceptación no es generalizada.
Con la estimulación magnética se regula la actividad de las neuronas, siendo el objetivo en el caso de este ensayo clínico aumentar la conectividad de algunas regiones cerebrales que se han asociado a la fatiga en la EM.
Las sesiones se realizaron a lo largo de 6 semanas a razón de tres sesiones semanales y en ellas participaron un total de 28 pacientes divididos en tres grupos; un grupo recibió estimulación en la zona de la corteza prefrontal, otro en la corteza motora y un tercer grupo solo recibió un simulacro de estimulación.
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¿Se logró aliviar la fatiga?
Sí, aunque es un sí con muchas aclaraciones detrás. El grupo que mejores resultados experimentó fue el que recibió la estimulación en la zona de la corteza motora.
En ellos disminuyó en más de un punto el resultado de una escala que sirve para valorar la severidad de la fatiga.
Sin embargo, el grupo placebo, que solo recibió un procedimiento simulado no real, experimentó mejorías más significativas que el grupo que recibió la estimulación en la corteza prefrontal.
Al pasar las semanas esas diferencias se mantuvieron, aunque el grupo placebo pasó a ser el que menos beneficios experimentó.
Los efectos adversos más comunes fueron dolor de cabeza e incomodidad con el casco, sin que se hayan reportado eventos adversos graves.
¿Los resultados son significativos? Según los autores, al menos son suficientes para justificar que se siga investigando en esta área.
En su opinión son prometedores, pero el número limitado de personas implicadas en este ensayo clínico no permite llegar a conclusiones más avanzadas.
Hay que tener en cuenta que, aunque la estimulación magnética transcraneal no es un tratamiento que elimina la fatiga, si logra aliviar su severidad ya sería un avance significativo para muchos pacientes.
La estimulación magnética transcraneal profunda está aprobada en Europa para el tratamiento de algunas enfermedades, entre ellas la esclerosis múltiple, pero también para las consecuencias derivadas del ictus y para la depresión resistente, tal vez su aplicación más extendida.
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Fuentes y referencias
Charité – Universitätsmedizin Berlin (2018): Deep brain stimulation — a new treatment approach in patients with multiple sclerosis. En https://www.eurekalert.org/pub_releases/2018-02/c-ub-dbs020718.php
Gaede, G et al. (2018): Safety and preliminary efficacy of deep transcranial magnetic stimulation in MS-related fatigue. Neurol Neuroimmunol Neuroinflamm
