“Interruptor dopaminérgico”, ¿conoces el riesgo de activarlo?

El síndrome de abstinencia a los agonistas de la dopamina se define como un grupo de síntomas que aparecen luego de descontinuar el consumo de medicamentos que afectan la transmisión dopaminérgica.

sindrome de abstinencia a los agonistas dopaminérgicos

En bioquímica se utiliza el término agonista para definir aquellas sustancias que pueden unirse a un determinado receptor celular y provocar acciones similares a las producidas por sustancias fisiológicas.

Uno de los tratamientos principales para la enfermedad de Parkinson (EP) consiste en la utilización de agonistas de la dopamina.

La acción de estas sustancias es más duradera en comparación con la levodopa (precursor metabólico de la dopamina y tratamiento más eficaz de los síntomas motores de la EP), ya que su vida media en el organismo es mayor.

La reducción de la dosis de los agonistas puede causar síntomas agudos de abstinencia similares a los reportados por los adictos a la cocaína.

Esto ocurre porque al igual que la cocaína, los agonistas de la dopamina intervienen en las rutas de recompensa del cerebro.

El nombre con el que se conoce este fenómeno es síndrome de abstinencia a los agonistas de la dopamina.

También te puede interesar leer: 7 mitos sobre la levodopa que todo enfermo de Parkinson debe conocer

Características de los agonistas de la dopamina

  • Tienen una estructura química molecular similar a la de la dopamina. Esto explica su capacidad para unirse a los receptores dopaminérgicos.
  • Su uso tiene una importante ventaja con respecto al empleo de levodopa, pues no requieren metabolismo previo. Por tanto, actúan directamente sobre los receptores.
  • Como se unen directamente, la estimulación de los receptores dopaminérgicos se presenta de una forma más constante y cercana a la fisiológica; a diferencia de la estimulación pulsátil que provoca la levodopa.
  • No actúan sólo sobre el sistema dopaminérgico, también pueden activar las vías serotoninérgicas y noradrenérgicas.
  • La mayoría son de administración oral, aunque existen excepciones que se pueden administrar por vía intravenosa o subcutánea.

También te puede interesar leer: ¿Cuál es exactamente la relación del párkinson con la dopamina?

¿Cuáles son los principales síntomas del síndrome de los agonistas dopaminérgicos?

síntomas del síndrome de abstinencia a los agonistas de la dopamina

Como se dijo anteriormente el síndrome de abstinencia a los agonistas de la dopamina se define como un grupo de síntomas agudos.

Su severidad es variable y se ha demostrado que correlaciona con la dosis consumida.

En la mayoría de los casos se presenta como un malestar general que llega a comprometer las funciones sociales y ocupacionales.

Este malestar se acompaña de ataques de pánico, ansiedad, agitación, irritabilidad, depresión, náuseas, sudoración, fatiga, mareos, insomnio y tendencia al re-consumo.

Es importante señalar que solo la aparición repentina de estos síntomas o el aumento significativo de su intensidad, es lo que debe determinar que se comience a considerar un posible padecimiento del síndrome.

También te puede interesar leer: Trastorno del control de los impulsos en la enfermedad de Parkinson: mejor prevenir, porque la solución no es sencilla

¿Cuáles son las medidas a tomar ante la aparición del síndrome?

síndrome de abstinencia a los agonistas de la dopamina

Primeramente se debe aclarar que los síntomas no son aliviados por otros medicamentos y que el síndrome no evoluciona de la misma forma en todas las personas.

En algunos pacientes, es probable que los síntomas sean leves y desaparezcan al poco tiempo de iniciar (uno o dos meses).

En el caso de aquellos con síntomas más severos, las alternativas son bien escasas, pues se ha descrito que el aumento de la dosis de levodopa no es útil y se desconoce la utilidad de tratar la depresión y la ansiedad con medicamentos antidepresivos.

En estos casos más severos algunos estudios reportan que reiniciar el consumo del agonista fue la única forma de controlar los síntomas del síndrome.

También te puede interesar leer: Complicaciones y efectos secundarios de los medicamentos para el párkinson

Bibliografía

Edwards, M. J. (2013). Dopamine agonist withdrawal syndrome (DAWS): perils of flicking the dopamine ‘switch’. J Neurol Neurosurg Psychiatry February 84, 120.

Margarita Pondal, C. M. (2013). Clinical features of dopamine agonist withdrawal syndrome in a movement disorders clinic. J Neurol Neurosurg Psychiatry 84 , 130-135.

Stephane Thobois, E. B. (2010 ). Reply: Dopamine agonist withdrawal syndrome and non-motor symptoms after Parkinson’s disease surgery. Brain 133, 1-4.

 

Lechner Rodríguez Aguilar