Investigación sugiere que niveles bajos de vitamina D se asocian a peor salud cognitiva y mayor riesgo de demencia, especialmente entre personas con piel oscura como los hispanos y afroamericanos.
La vitamina D es fundamental para absorber el calcio y la deficiencia de este compuesto en el organismo se ha asociado a enfermedades como el cáncer, la osteoporosis y ahora un estudio publicado en la revista JAMA Neurology concluye que bajos niveles de vitamina D se asocian con un declive acelerado en las funciones cognitivas como la memoria y las funciones ejecutivas, especialmente entre afroamericanos e hispanos quienes tienen una mayor prevalencia de déficits de vitamina D.
Entre los mayores de 65 años los niveles deficientes (más bajos) o insuficientes de vitamina D pueden alcanzar hasta más del 50 % de la población según un estudio anterior citado por el portal MNT. Entre las causas de esta alteración está una insuficiente obtención mediante las comidas, aunque no es muy abundante en los alimentos se encuentra en productos como el salmón, el hígado de vacuno y el queso. Otra causa de la deficiencia de Vitamina D es la falta de exposición al sol, la fuente de obtención fundamental en el ser humano. Entre las personas con piel oscura la concentración de melanina en la piel es mayor, eso les protege del cáncer de piel pero también inhibe la síntesis de vitamina D; de ahí que sea un grupo de riesgo de padecer déficits de esta sustancia.
Investigadores de la Universidad de California en Davis y de la Universidad de Rutgers ambas de EE.UU, estudiaron a 382 personas con una media de edad de 75.5 años entre los años 2002 y 2010. Durante ese tiempo se les realizó una evaluación anual de los niveles de vitamina D y de los procesos cognitivos. Sobre los resultados habla en un comunicado de prensa de la Universidad de California Joshua Miller, uno de los investigadores participantes en el estudio:
Independientemente de la raza o el origen étnico, las capacidades cognitivas de base y otros factores de riesgo, la insuficiencia de vitamina D se asoció con disminuciones significativamente más rápidas tanto en la memoria episódica como en el rendimiento de la función ejecutiva.
Las personas con deficiencia de vitamina D experimentaron un declive cognitivo entre dos y tres veces mayor que las personas que tenían niveles normales. En dos años su deterioro era igual al que tenían en 5 años los participantes con valores normales. Los datos asombraron a los investigadores, según otro de los autores, Charles DeCarli:
Esperábamos ver deterioro cognitivo en personas con bajo nivel de vitamina D. Lo que fue inesperado fue lo profundo y rápido del impacto.»
Entre los afroamericanos y los hispanos se detectaron problemas con los niveles de vitamina D en el 70% de los participantes en comparación con el 54% de los caucásicos. Los autores del estudio opinan que entre las personas de piel oscura bajos niveles de vitamina D deben ser considerados un riesgo de demencia.
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Vitamina D para la salud cognitiva.
Para los investigadores estos resultados unidos al de otras investigaciones son suficientes para comenzar a hablar de la necesidad de tomar suplementos de vitamina D. En palabras del profesor Joshua Miller:
Este trabajo, y el de otros, sugiere que hay suficiente evidencia para recomendar que las personas de 60 años o más hablen de tomar un suplemento diario de vitamina D con sus médicos (…) Incluso si resulta no ser efectivo, hay un riesgo muy bajo de salud en hacerlo.
Para De Carli:
Ésta es una deficiencia de vitamina que puede ser fácilmente tratada y que tiene otras consecuencias para la salud. Tenemos que empezar a hablar de ello. Y tenemos que empezar a hablar de ello, sobre todo para la gente de color, para quienes la deficiencia de vitamina D parece presentar un riesgo aún mayor .
Sin embargo, con las evidencias que hay en la actualidad no se puede afirmar que los suplementos de vitamina D puedan tener un efecto positivo sobre la salud cognitiva. Otras investigaciones han demostrado que tradicionales complementos alimenticios como el Omega 3 que se creían tan beneficiosos para el cerebro al final, al menos en su forma sintética, no tienen el efecto esperado sobre la salud cognitiva.
En opinión de los autores se debe hacer una investigación para analizar el efecto de la terapia de reemplazo de vitamina D entre hispanos y afroamericanos.
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