4 causas de cefalea ocular que probablemente no conocías


El dolor de cabeza con énfasis en la región ocular es un trastorno común que puede ser provocado por gran cantidad de patologías.

cefalea ocular

La migraña, cefalea de Horton, la hemicránea paroxística crónica y la neuritis óptica son trastornos diversos y particulares que pueden causar cefalea ocular en gran cantidad de casos. Es sobre sus principales características de lo que hablaremos el día de hoy.

Migraña como causa de cefalea ocular

Este trastorno suele afectar a pacientes a partir de los 20 años de edad y tiene un componente heredo-familiar muy importante.

Clásicamente es posible distinguir la migraña con aura como un subtipo especial o también llamado “clásico”, caracterizado por la aparición de sensaciones anormales (generalmente visuales o auditivas) que preceden o acompañan al dolor.

Por otro lado, también existe la migraña sin aura, que de hecho es más común que la anterior.

El dolor suele afectar a la región frontal y parietal, pero en algunos casos puede comprometer la región ocular. Los pacientes suelen referir el dolor como opresivo o también retroocular (detrás de los ojos).

Es importante distinguir este dolor del resto de las cefaleas, ya que la duración y la intensidad es mucho mayor en el caso de la migraña con componentes de cefalea ocular.

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Cefalea en racimos

cefalea ocular

También conocida como cefalea de Horton, se caracteriza por aparecer entre la tercera y cuarta década de la vida y posterior a diversas situaciones como el uso de cigarrillo y la ingesta de alcohol.

Lo que diferencia este trastorno es la presentación episódica o “en racimos” de la enfermedad. Suele presentarse como dolor unilateral que generalmente dura entre dos semanas y tres meses, para luego volver a presentarse después de períodos asintomáticos de por lo menos un mes.

La localización del dolor suele relacionarse mucho con los ojos (localización supraorbitaria o retroocular), siendo una de las principales causas de cefalea ocular.

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Cefalea hemicránea paroxística crónica

La edad de presentación de esta entidad es entre los 20 y 40 años (similar a la migraña) y suele presentarse con mucha más frecuencia en las mujeres. El momento de la aparición del dolor puede ser a cualquier hora del día y se ha relacionado con ciertos factores hormonales y con el sueño REM.

La intensidad del dolor varía enormemente dependiendo del tipo de paciente, por lo que puede haber presentaciones muy leves hasta incapacitantes durante los ataques agudos de la enfermedad.

Generalmente el dolor es unilateral (a predominio de la región ocular) y suele ser de carácter pulsátil. También se asocian una serie de fenómenos como lagrimeo excesivo, enrojecimiento de la conjuntiva, secreciones nasales e hinchazón de los párpados.

Neuritis óptica

neuromielitis óptica

En este caso se trata de una lesión inflamatoria del nervio óptico (encargado de transmitir los impulsos nerviosos hacia el cerebro, para que pueda interpretarse la información captada por los ojos) que suele ser consecuencia de varias enfermedades, como los trastornos desmielinizantes o infecciones del sistema nervioso central.

Es una de las causas más comunes de pérdida de la visión en pacientes jóvenes y suele ser de rápida evolución, aunque con tratamiento adecuado el trastorno puede ser reversible.

En la mayoría de los casos este proceso inflamatorio puede causar dolor de intensidad variable, pero que empeora a medida que se alarga la afección del nervio, por lo que el diagnóstico y tratamiento adecuado es imprescindible.

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Fuentes y referencias:

Isaza R, et al. Cefaleas de localización y compromiso oculares. Iatreia 2005;18(4):417-30.

Diego J. Pereira