Estos fármacos para el cáncer resultan prometedores en el tratamiento de la ELA.


Algunos ya están autorizados para el tratamiento del cáncer, mientras otros están en ensayo clínico. Todo indica que estos fármacos apuntan a una diana terapéutica válida para el tratamiento de la ELA.

Uso de antipsicóticos aumenta mortalidad en personas con párkinson

Desde hace mucho tiempo un grupo de fármacos empleados en el tratamiento del cáncer, los llamados inhibidores de la tirosina cinasa (o quinasa), están siendo investigados en el campo de la neurodegeneración. Y los resultados, por el momento, resultan prometedores para la esclerosis lateral amiotrófica (ELA).

Un estudio  reciente, publicado en la revista Science Translational Medicine y realizado por investigadores de la Universidad de Kyoto, en Japón así lo indica.

La investigación se realizó en neuronas motoras derivadas de un paciente con ELA (obtenidas mediante técnicas de medicina regenerativa) y en modelos de ratón de la enfermedad. Es ciencia básica del más alto nivel, esa que constituye un cimiento sólido sobre el que desarrollar aplicaciones clínicas.

También te puede interesar leer: Enfermedades neurodegenerativas.

¿Qué se encontró?

1416 compuestos diferentes fueron probados en las neuronas motoras derivadas de un enfermo de ELA.

La persona es portadora de una mutación genética que solo se encuentra en el 2% del total de afectados por la enfermedad, un detalle que condiciona los resultados pero que ya veremos más adelante cómo se manejó.

De los más de mil compuestos evaluados, 27 lograron aumentar la supervivencia de las neuronas motoras y de esos, más de la mitad correspondían a los llamados inhibidores de la tirosina quinasa.

Recientemente se conocieron los resultados positivos de un ensayo clínico de fase III para el tratamiento de la ELA con otro inhibidor de la tirosina quinasa, Masitinib. El compuesto tiene oportunidad de salir al mercado y abrir el camino a fármacos más ambiciosos.

En el estudio realizado por los investigadores japoneses, genéticamente se inhibió la acción de las tirosinas quinasas y nuevamente se encontró que mejoraba la supervivencia de las neuronas motoras.

También te puede interesar leer: Entusiasmo en la comunidad ELA: otro fármaco tiene oportunidad de salir al mercado.

Pero ahí no quedó la investigación. Los científicos escogieron uno de los fármacos, denominado bosutinib y aprobado para el tratamiento de algunos casos de leucemia mieloide crónica, y lo probaron en neuronas motoras derivadas de otros enfermos de ELA sin la mutación que antes mencionamos.
tratamiento de la ELA
Y funcionó, el fármaco logró disminuir los niveles de proteínas tóxicas y aumentar la supervivencia de las neuronas.

Llegó entonces el momento de probar en ratones (sí, ya advertimos que era ciencia básica de la más alta calidad). Y aquí las noticias fueron menos positivas: aunque sí se alcanzó a inhibir la actividad de las enzimas y disminuir el nivel de una proteína tóxica, la aparición de la enfermedad solo se retrasó por 11 días y se extendió la supervivencia de los animales por 8.

Sin duda los investigadores esperaban más, pero igualmente el estudio apunta a que esta vía es una diana terapéutica con mucho potencial.

Hay que tener en cuenta que varios de los fármacos ya están en el mercado, lo que facilita el camino de cara a ensayos clínicos.

Un fármaco muy semejante al Bosutinib, el nilotinib, está siendo evaluado en ensayos clínicos como tratamiento de la enfermedad de Alzheimer y el párkinson.

También te puede interesar leer: No sin polémica, la FDA aprueba Radicava para el tratamiento de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA).

Referencias

Imamura, K (2017): The Src/c-Abl pathway is a potential therapeutic target in amyotrophic lateral sclerosis. Science Translational Medicine (9) 391.

Bowman, M (2017): Certain Cancer Drugs Held Out as Prospects for ALS Therapy. AlzForum. Disponible en http://www.alzforum.org/news/research-news/certain-cancer-drugs-held-out-prospects-als-therapy

Redacción TiTi