La respiración nasal logra influir sobre la actividad cerebral y según un experimento reciente, ayuda a consolidar la memoria olfativa en comparación con la respiración por la boca.
Respiras y no sabes lo que desatas con cada toma de aire.
Resulta que la presión que el aire ejerce sobre la fosa nasal es detectada por las neuronas sensoriales olfativas y esta información llega al bulbo olfativo, que genera oscilaciones que viajan a otras regiones del sistema nervioso central, llegando a provocar cambios en las oscilaciones cerebrales de regiones implicadas en la memoria y el aprendizaje.
¿Mucha información? Puedes quedarte solo con el hecho de que se ha observado en animales de investigación cómo se forma la memoria olfativa y aunque en humanos no están completamente identificadas las estructuras implicadas, también se sabe que la respiración nasal es clave en este proceso.
Ahora bien, ¿necesitamos del olfato para consolidar esa memoria? Según un curioso experimento, sí. Los resultados han sido publicados en la revista Journal of Neuroscience y sobre ellos te hablaremos en este artículo.
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Cierra la boca, respira por la nariz y ¡recuerda!
En el experimento participaron 24 sujetos que tenían entre 19 y 25 años. En un primer momento les fueron presentados 12 olores con la instrucción de que debían intentar memorizarlos.
Inmediatamente después de la exposición a los olores a una parte del grupo se les cerró la nariz y solo podían respirar por la boca, mientras el resto de los voluntarios sí respiraban por la nariz, pero una cinta les impedía la entrada de aire por la boca.
Así estuvieron durante una hora, tiempo para que lograran consolidar la memoria de los olores. Posteriormente les fueron presentados los doce olores iniciales más otros doce nuevos y debían reconocer las sustancias que habían olido al inicio.
Como seguramente ya imaginas, el grupo que permaneció con la boca cerrada y la nariz libre se desempeñó mejor en la tarea de reconocimiento.
Estos resultados sugieren que la respiración nasal no solo es importante en la codificación de la información sensorial que vamos a memorizar, sino que además puede tener un rol destacado en la consolidación de la memoria.
En las conclusiones de su estudio, los investigadores plantean que:
Estos resultados proporcionan la primera evidencia de que la respiración tiene un impacto directo en la consolidación de eventos episódicos y brinda mayor apoyo a la idea de que las funciones cognitivas básicas están moduladas por el ciclo respiratorio”.
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Fuentes y referencias
Artin Arshamian, Behzad Iravani, Asifa Majid, Johan N. Lundström (2018): Respiration modulates olfactory memory consolidation in humans. Journal of Neuroscience, 3360-17; DOI: 10.1523/JNEUROSCI.3360-17.2018
Society for neuroscience (2018): Nose breathing enhances memory consolidation. En https://eurekalert.org/pub_releases/2018-10/sfn-nbe101918.php
