La parálisis cerebral infantil es causa frecuente de discapacidad en los pacientes en edades pediátricas, generando trastornos motores que afectan el desarrollo tanto psicomotor como social de los que la padecen.
La parálisis cerebral infantil (PCI) es una afección neurológica crónica en la cual el paciente pediátrico que la padece desarrollará trastornos permanentes en el control de los movimientos corporales.
En los afectados por PCI se desarrollan anormalidades de la postura, la coordinación del movimiento y el tono muscular, responsable este último del mantenimiento de la tensión muscular aún en estado de reposo.
En la PCI existe una lesión de carácter permanente, irreversible y no progresiva localizada en las áreas motoras del cerebro aún inmaduro.
Generalmente se suele acompañar de otros trastornos sensitivos, cognitivos, conductuales, del lenguaje y perceptivos, así como convulsiones.
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Se han descrito varios factores de riesgo asociados a la parálisis cerebral infantil
Durante el embarazo existen determinados factores que pueden alterar el correcto desarrollo del bebé. A las alteraciones que se producen durante el tiempo de gestación se denominan factores prenatales.
Entre los pacientes con parálisis cerebral infantil algunos de ellos son:
- Hipertiroidismo materno.
- Retardo del crecimiento intrauterino.
- Corioamnionitis (infección del líquido amniótico y las membranas que lo contienen).
- Hemorragias intrauterinas.
- Consumo de drogas.
- Hipertensión arterial durante la gestación (preeclampsia).
- Enfermedades infecciosas (VIH, toxoplasmosis, rubeola).
- Gemelaridad.
Existen también factores de riesgo perinatales, que surgen asociadas al proceso de parto, que es importante conocer:
- Prematuridad (nacimiento antes de las 37 semanas de gestación)
- Bajo peso
- Asfixia (hipoxia-isquemia)
- Hiperbilirrubinemia (aumento en la sangre de la bilirrubina)
- Traumatismos
- Infecciones del sistema nervioso central
Entre los factores de riesgo postnatales (posteriores al parto) relacionados con la PCI se destacan:
- Traumas de cráneo
- Hemorragia intracraneal
- Infarto cerebral
- Infecciones (meningitis, encefalitis)
- Hidrocefalia
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Signos y síntomas de la parálisis cerebral infantil
Los síntomas y signos de la parálisis cerebral infantil variarán en dependencia del grado de afectación que presente el menor, por lo que podrán existir cuadros más leves, mientras que serán más severos.
En dependencia de los síntomas y signos que predominen, también se puede hablar de los tipos de parálisis cerebral infantil.
En muchas ocasiones son los padres y familiares los que acuden a consulta refiriendo que el niño no realiza con destreza las actividades motoras correspondientes con su edad.
Al examinar, en el niño se podrá constatar:
- Tono muscular aumentado y movimientos voluntarios disminuidos, en todo el cuerpo, en solo un lado o en los miembros inferiores (Parálisis Cerebral Espástica).
- Movimiento involuntarios e incoordinados, así como cambios bruscos del tono muscular, pasando de estados de hipertonía, donde aumenta el tono, a estados de hipotonía, donde disminuye el tono (Parálisis Cerebral Atetósica o Discinética).
- Tono muscular disminuido, incoordinación, trastornos del equilibrio y la dirección (Parálisis Cerebral Atáxica).
- Tono muscular disminuido, que evoluciona generalmente hacia otras formas de Parálisis Cerebral (Parálisis Cerebral Hipotónica).
- Combinación de varios síntomas anteriores, sin el predominio de algún tipo específico de las modalidades anteriores (Parálisis Cerebral Mixta).
Asociado a las manifestaciones motoras, en estos pacientes pueden aparecer otras alteraciones como discapacidad intelectual, convulsiones y trastornos psicosociales, que a su vez se pueden ver también comprometidas por alteraciones del lenguaje.
Se podrá acompañar de alteraciones a nivel de los órganos de los sentidos.
Por ejemplo, con relación a la visión el paciente puede manifestar déficit visual, ceguera, estrabismo, etc. Con relación a la audición, se puede desarrollar hipoacusia leve o sordera neurosensorial.
Trastornos sensitivos como el no reconocimiento de los objetos según su forma a través del tacto (estereognosia), incapacidad para reconocer, diferenciar e integrar la posición de los miembros paralizados de forma parcial o debilitados (asomatognosia).
Pérdida del volumen muscular de los miembros afectados, a lo que se suele asociar trastornos vasculares; deformidades óseas y síntomas gastrointestinales como estreñimiento crónico, secundario a la ausencia o disminución actividad motora general.
Podrán presentar trastornos de la conducta, que incluso pueden llegar a comprometer las posibilidades de tratamiento; alteraciones emocionales con mala adaptación social, aislamiento, depresión, ansiedad, así como pérdida de la relación entre la evolución afectiva y el nivel intelectual (inmadurez afectiva).
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El diagnóstico precoz es muy importante, pero puede resultar difícil
Aun cuando la lesión cerebral pudo haber ocurrido en algunos casos durante la vida fetal (prenatal), generalmente no se logra diagnosticar hasta meses, incluso año después del nacimiento.
Es por esto que la información brindada por los padres sobre los antecedentes prenatales, natales y postnatales del niño resulta muy importante, de ahí que el especialista deberá realizar un exhaustivo interrogatorio médico.
Se realizará un examen físico detallado, enfocando la atención en el desarrollo psicomotor del menor según lo establecido como normal para su edad, así como un correcto examen neurológico general.
El médico se podrá apoyar de exámenes de laboratorio, estudios de neuroimagen (radiografías, ultrasonografía, tomografía axial computarizada, resonancia magnética nuclear, etc.), electrofisiológicos, así como de análisis metabólicos y genéticos si resultan necesarios.
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El tratamiento debe ser realizado por un equipo multidisciplinar
El paciente debe ser atendido por un equipo integrado por pediatras, neurólogos, neurocirujanos, traumatólogos, fisioterapeutas y rehabilitadores, logopedas, psicólogos y psicopedagogos, así como otros profesionales, quienes junto a los familiares del niño trabajaran en reducir anomalías del movimiento y del tono (aspecto motor), los trastornos asociados, así como la prevención de posteriores alteraciones sobre el desarrollo general del paciente.
En la prevención de la parálisis cerebral infantil, el cuidado de la madre y él bebe es fundamental
Al existir factores prenatales, natales y postnatales que pueden influir en el desarrollo de la parálisis cerebral infantil, es clave que tanto la madre como sus familiares, guiados por su médico de cabecera, eviten los factores de riesgo que puedan ser modificables.
En ese sentido, proponemos algunas recomendaciones:
- Adecuado seguimiento médico de la gestante, desde que se detecte el embarazo hasta el feliz término de este.
- Adecuada nutrición de la madre, con asociación de suplementos dietéticos que incluyan ácido fólico, hierro, etc.
- No consumir alcohol, cigarrillos o drogas durante el embarazo.
- Prevención de enfermedades infecciosas intrauterinas, rubeola, toxoplasmosis, etc.
- Correcto seguimiento y control de la tensión arterial durante la gestación.
- Evitar los traumatismos en la gestante y después del parto, en el niño.
- Diagnóstico y tratamiento precoz de la hiperbilirrubinemia (aumento del nivel de bilirrubina en sangre) en el recién nacido.
- Evitar el desarrollo de enfermedades infecciosas neurológicas en el niño.
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Fuentes y referencias:
- Gomez S, Jaimes VH, Palencia CM, Hernandez M, Guerrero A. Paralisis Cerebral Infantil. Artículo de Revisión. Archivos Venezolanos de Puericultura y Pediatría, vol. 76, núm. 1, enero-marzo, 2013, pp. 30-39. Disponible en: https://www.google.com.cu/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=1&ved=0ahUKEwinztrpnJTaAhVM4VMKHfWQDMwQFggmMAA&url=http%3A%2F%2Fwww.redalyc.org%2Fpdf%2F3679%2F367937046008.pdf&usg=AOvVaw37PabIhhjl8o426AlnLV2w
- Rodríguez C, Rodríguez S. Atención Temprana en Parálisis Cerebral Infantil. Trabajo de Fin de Grado. Junio 2016. Disponible en: https://riull.ull.es/xmlui/bitstream/handle/915/2626/ATENCION%20TEMPRANA%20EN%20PARALISIS%20CEREBRAL.pdf?sequence=1