La acatisia en el párkinson puede llegar a afectar a más del 26% de los enfermos. Se caracteriza por una sensación de inquietud que lleva al paciente a sentir la necesidad de moverse.
El párkinson es una de las enfermedades neurodegenerativas más frecuentes en la actualidad y, aunque no son las únicas, por lo general se le identifica con sus manifestaciones motoras.
Entre tales manifestaciones están la rigidez, los temblores y la lentitud de movimientos, pero lejos están de ser las únicas. Existen otras que, incluso, pueden aparecer en sujetos sin párkinson debido a la ingestión de medicamentos. Específicamente hoy queremos hablarte de la acatisia. Sigue leyendo, en pocos minutos te explico qué es.
También te puede interesar leer: Acatisia, un efecto adverso medicamentoso que puede ser peligroso
¿Qué es la acatisia?
La acatisia es una sensación desagradable, de intranquilidad, que a menudo produce movimientos inquietos. Cuando es grave, incluso puede causar que el afectado permanezca gran cantidad de tiempo realizando movimientos sin propósito alguno, por ejemplo, cruzar y descruzar brazos o piernas de manera constante.
Es posible también que no pueda mantenerse sentado o deba estar todo el tiempo caminando por una habitación.
¿Qué causa la acatisia?
Sin tomar en consideración por ahora las consecuencias de la enfermedad de Parkinson, la acatisia puede desencadenarse como efecto secundario a la ingestión de neurolépticos, un tipo de medicamento que se usa de manera habitual en el tratamiento de personas con alteraciones psicóticas (ven y escuchan cosas que no se corresponden con la realidad), una condición que también tiene una prevalencia significativa entre los enfermos de párkinson.
También te puede interesar leer: Psicosis en el párkinson
¿Es frecuente la acatisia en el pákinson?
Los estudios sugieren que entre un 20 y un 25 % de los enfermos de párkinson sufrirán acatisia.
Por lo general suele afectar a los pacientes con edad más avanzada y sobre todo, a aquellos en que la enfermedad ha comenzado cuando son más jóvenes .
También te puede interesar leer: Parkinson juvenil: síntomas, causas, evolución y tratamiento
¿Y se sabe algo de por qué ocurre la acatisia en el párkinson?
Las causas no están del todo claras, pero algunos hallazgos sugieren varias hipótesis. Se ha observado que en las personas en que la acatisia ha sido inducida por neurolépticos existe una reducción de la dopamina (sustancia que algunas neuronas usan para comunicarse) en una parte del cerebro denominada región mesocortical.
En el párkinson sobre todo se dañan las neuronas que se comunican a través de la dopamina en la región identificada como nigroestrial, pero la zona mesocortical también está afectada, especialmente cuando aparecen déficits cognitivos y cuando predominan los síntomas cómo la rigidez y la acinesia.
Como los enfermos de párkinson que padecen acatisia por lo general presentan también ese tipo de síntomas, se cree que la afectación en la zona mesocortical tiene un papel trascendental en la aparición de la acatisia en estos de pacientes.
¿Qué opciones de tratamiento existen?
El tratamiento comienza por modificar la medicación del enfermo en caso de que esté recibiendo tratamiento con neurolépticos. En algunos casos se modificará la dosis, en otros habrá que parar el tratamiento o probar con otro fármaco.
Curiosamente un neuroléptico empleado en dosis bajas, la clozapina, parece tener un efecto positivo sobre la acatisia nocturna, según algunos pequeños estudios que se han realizado.
Sin embargo, el tratamiento con neurolépticos en personas con párkinson debe ser orientado con mucha precaución, ya que se ha documentado en repetidas ocasiones que aumenta significativamente el riesgo de muerte.
También te puede interesar leer: 8 +1 recomendaciones básicas para personas que viven con enfermedad de Parkinson
Referencias bibliográficas
Akathisia. Disponible en http://parkinsonhope.org/akathisia/
Comella, C., & Goetz, C. (1994). Akathisia in Parkinson’s Disease. Movement Disorders 9(5), 545-549