Cómo mejorar el cerebro: recomendaciones del Instituto de Medicina de EE.UU.

Cómo mejorar el cerebro es una interrogante cada vez más popular, el Instituto de Medicina de EE.UU ha querido dar pistas en ese sentido.

Cómo mejorar el cerebro

El Instituto de Medicina de EE.UU recientemente publicó un informe  con recomendaciones y advertencias relativas a la salud cerebral. El documento  fue elaborado por algunos de los neurocientíficos y psiquiatras más importantes del país quienes hicieron uso  de manera oficial de un término cada vez más popular “envejecimiento cognitivo”.

Denominan así un proceso  natural y continuo, pero muy variable, que afecta la memoria, el pensamiento y la toma de decisiones  pero, insisten, no es una enfermedad como el Alzheimer u otra forma de demencia.

Los expertos hacen énfasis en que el declive cognitivo no es inevitable y que mucho se puede hacer para mantener el cerebro sano.  En ese sentido hacen varias recomendaciones que hoy os traemos.

¿Qué puede ayudar a mejorar el cerebro?


Cómo mejorar el cerebro

Ejercicio: los ejercicios aeróbicos son especialmente beneficiosos para el cerebro y mucho mejor si se combinan con ejercicios de fuerza.

Mantenerse social e intelectualmente  activo: Actividades estimulantes para nuestro cerebro como leer un libro o aprender un nuevo idioma  ayudan a mantener las funciones cognitivas. En este sentido también es positivo realizar actividades sociales como voluntariado o simplemente conversar con amigos.

Mantener  nuestro corazón sano: ya casi es un dicho “lo que es bueno para tu corazón es bueno para tu cerebro”. Factores como tensión y colesterol  altos, diabetes (especialmente en la mediana edad) están vinculados a una mala salud cerebral.

Llevar una dieta sana:  aunque los autores del estudio dicen que ninguna dieta ha demostrado mantener o mejorar la salud cerebral sí hacen referencia a la dieta Mediterránea y a la dieta DASH(diseñada para mejorar los casos de hipertensión) que justifican comer menos carne y aumentar el consumo de nueces, cereales, legumbres ,  vegetales y aceite de oliva.

Las fuentes de Omega-3(como los pescados azules) han demostrado eficacia en algunos estudios. La ingesta moderada de alcohol también parece ser beneficiosa (menos de dos tragos por día) aunque un exceso en este sentido es sin dudas muy dañino.

Dormir bien: Varios estudios han mostrado que una mala calidad del sueño está vinculado al deterioro cognitivo. Desórdenes nocturnos como la apnea del sueño también aumentan  el riesgo de padecer problemas de memoria.

¿Qué puede dañar el cerebro?

Cómo mejorar el cerebro

Determinados medicamentos: los expertos hacen referencia al gran consumo de medicamentos que se da a medida que aumentan los años y que puede llevar a complicaciones importantes. Se menciona particularmente el vínculo entre deterioro cognitivo y el consumo de medicamentos anticolinérgicos fuertes  y las benzodiacepinas.

Depresión: la depresión en la mediana edad y en la vejez está directamente ligada a la demencia. Tratarla mejora significativamente la calidad de vida.

Pérdida de visión y audición: ambos problemas están vinculados a un pobre desempeño cognitivo y mejorarlos, en la medida de lo posible, puede ser de mucha ayuda.

Stress: conectado a un aumento de la velocidad del declive cognitivo. Los expertos admiten la posibilidad de que métodos como la meditación o el mindfulness puedan ayudar pero aún es necesario más estudio en ese sentido.

Delirios y hospitalización: el delirio está fuertemente conectado a problemas con la salud cerebral  y sin embargo  puede ser prevenido entre un 30 % y un 50% de los casos. La hospitalización es una fuente de estrés muy importante para los mayores y también está  interrelacionada con el declive cognitivo.    Se aconsejan algunas estrategias para ayudar en situaciones  de  hospitalización como  mantener a la persona hidratada, controlar el dolor y la calidad del sueño.

Puede que sí, puede que no ¡Cuidado!

 Juegos de entrenamiento cerebral : se recomienda valorar  cuidadosamente si la efectividad de esos juegos ha sido probada. En muchos casos aunque se mejore el rendimiento en el juego esas habilidades no son extrapolables a la vida real.

Suplementos: los norteamericanos gastan más de 30 billones al año en complementos nutricionales y sin embargo aún no hay una evidencia consistente de que mejoren la salud cerebral.

Vitamina E: no parece ayudar a nuestro cerebro y en dosis elevadas se vincula a un mayor riesgo de muerte.

Vitamina B6 y B12:  no proporciona beneficio a los adultos mayores que no están deficientes de folato.

Vitamina D: aunque una deficiencia de esta vitamina si se ha vinculado a una menor salud cerebral tomar complementos no parece ayudar, es más, en altas dosis puede afectar la atención.

Ginkgo Biloba: no se considera efectivo para prevenir el deterioro cognitivo, dicen los expertos.

Como seguro habéis apreciado algunas de las recomendaciones contradicen los últimos descubrimientos en el área del envejecimiento que os hemos ido contando en nuestro blog. Esta situación no es extraña en el mundo científico donde los resultados  se suceden cada día pero llegar a establecer algo como válido  lleva años de investigación.

El informe del instituto norteamericano ofrece pautas basándose en el conocimiento  existente hasta el momento de su elaboración, seguramente en años venideros seremos testigos de variaciones en las recomendaciones y advertencias. Por el momento hay mucho con lo que ayudarnos si queremos mejorar la salud de nuestro cerebro.  Manos a la obra.

Redacción TiTi