El sistema inmunitario constituye una suerte de fuerza armada interna de nuestro organismo. Aunque la salud actual sería impensable sin el uso de medicamentos que nos ayudan a vencer una gran gama de enfermedades, nuestro organismo cuenta con sus propias herramientas de defensa, concretadas en el sistema inmunitario. Pero, aunque parezca una paradoja, a veces podemos ser víctimas de nuestras propias armas. Ese es el caso del síndrome de Guillain Barré.
¿Qué es el síndrome de Guillain Barré?
La característica esencial del síndrome de Guillain Barré radica en el hecho de que el sistema inmune daña por parte del sistema nervioso periférico, es decir, el sistema de nervios y neuronas que conectan nuestro sistema nervioso central con el resto de nuestro organismo.
Los nervios están recubiertos por una sustancia llamada mielina y es esta sustancia específicamente la que se ve dañada por el sistema inmunológico, imposibilitando que los nervios se comuniquen de manera eficaz con otras partes del cuerpo, dando como resultado un gran número de anomalías y sintomatología clínica como por ejemplo; que nuestro músculos no sigan las indicaciones de nuestro cerebro.
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¿Cuáles son los síntomas del síndrome de Guillain Barré?
Es importante aclarar que los síntomas de esta enfermedad suelen ser muy agresivos y avanzan rápidamente, llegando a ocasionar la muerte en algunas circunstancias. Como ya comentábamos, el hecho de que nuestros músculos no respondan es una característica bastante frecuente, además pueden ocurrir que:
- Perdamos los reflejos de brazos y piernas
- Experimentemos sensación de entumecimiento
- Sintamos dolor, hormigueo
- Se dificulte nuestra coordinación motora
- Suframos contracciones musculares
- Caiga abruptamente nuestra tensión arterial
- Nos tornemos más torpes
- Perdamos la respiración, la capacidad de deglutir los alimentos, nos babeemos o suframos de desmayos y mareos.
Los persistencia e intensidad de los síntomas varían de una persona a otra. La máxima sensación de debilidad puede alcanzarse días o semanas después de haber comenzado con el cuadro clínico y atenuarse con igual variabilidad temporal. En algunos casos pueden pasar años en los que la persona aún sigue experimentando los síntomas.
¿Qué causa el síndrome de Guillain Barré?
Las causas del síndrome de Guillain Barré no son del todo conocidas, aunque sí hay algunas asociaciones que se han ido estableciendo a través de los años. Por ejemplo, es sabido que suele aparecer frecuentemente luego de infecciones de diversos tipos, bacterianas o virales, como la gripe aviar (Hahn, 1998).
La enfermedad por el virus del Zika, que ha llegado a ser frecuente en los últimos tiempos en America Latina y en el Caribe, ha mostrado estar también muy asociada al síndrome de Guillain Barré, al punto de que se estima que 1 de cada 4 mil personas con Zika padecerá esta dolencia asociada al sistema inmunitario, cuando generalmente el Guillain Barré afecta a 1 de cada 100 000 personas. Hasta el momento la relación que une al virus del Zika con el síndrome de Guillain Barré es desconocida.
¿Cómo se trata esta enfermedad?
No se ha descubierto hasta el momento un tratamiento curativo específico para el síndrome de Guillain Barré, aunque esto no significa que las personas no mejoran, al contrario; la mayoría de los pacientes llegan a experimentar una curación parcial o completa.
Dos métodos son los más empleados en el tratamiento del Guillain Barré: la plasmaféresis y la terapia de inmunoglobulina. En el primero se extrae la sangre del cuerpo y se pasa por un tratamiento en que se separan las células sanguíneas de la parte líquida de la sangre (llamada plasma), las células sanguíneas se devuelven al organismo, que sustituye el plasma que se ha removido.
Aunque no se sabe exactamente por qué funciona la plasmaféresis en el síndrome de Guillain Barré, el empleo de este método en otras enfermedades autoinmunes hace pensar que en el plasma que se remueve hay elementos del sistema inmunitario que intervienen en el proceso de la enfermedad.
Paradójicamente, el tratamiento con dosis elevadas de inmunoglobulina tiene una lógica contraria: se inyecta al paciente inmunoglobulinas, anticuerpos que de forma natural produce nuestro sistema inmune. En el primer caso quitas, en el segundo añades. Y en ambos funciona.
Otro punto importante del tratamiento del síndrome de Guillain Barré son las medidas preventivas en los casos graves, como el uso de sonda alimenticia para evitar complicaciones en aquellos pacientes donde la deglución se ha visto afectada.
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Referencias bibliográficas
F Hahn, A. (1998). Guillain-Barré syndrome. The Lancet, 398(9128), . Retrieved from http://www.thelancet.com/journals/lancet/article/PIIS0140-6736(97)12308-X/abstract
Síndrome de Guillain-Barré. Disponible en http://umm.edu/health/medical/spanishency/articles/sindrome-de-guillainbarre
Síndrome de Guillain-Barré. Disponible en http://www.msdmanuals.com/es/hogar/enfermedades-cerebrales,-medulares-y-nerviosas/trastornos-de-los-nervios-perif%C3%A9ricos/s%C3%ADndrome-de-guillain-barr%C3%A9
