En la actualidad no hay un método definitivo que permita predecir con años de antelación quién va a desarrollar la enfermedad de Alzheimer pero la ciencia está dando pasos firmes en ese sentido. Recientemente leíamos sobre una investigación que demostraba que se podían detectar los primeros cambios cognitivos mediante pruebas psicológicas 18 años antes del inicio de los síntomas evidentes de Alzheimer y también fue noticia un sistema, Cognivue, para detectar el deterioro cognitivo leve mediante ordenador. Sus creadores pretenden que sea un instrumento más en las consultas de salud.
Hoy la esperanza para un diagnóstico temprano viene de los biomarcadores del Alzheimer (sustancias que indican condiciones o procesos en el organismo). Investigadores de la Escuela Universitaria de Medicina de Saint Louis en Washington reportaron en un artículo publicado este 6 de junio en la revista Jama Neurology que algunos cambios en los biomarcadores para la enfermedad de Alzheimer se pueden detectar desde la mediana edad y ayudar a predecir quién desarrollará la enfermedad (Fuente: MedicaXpress)
Eso sí, anuncian que todavía es muy pronto para que este se convierta en un método diagnóstico predictivo pero ese es el objetivo final “un día esperamos utilizar esas mediciones para identificar y tratar a las personas antes que la pérdida de memoria y otros problemas cognitivos se hagan evidentes» expresó Ane Fagal, autora principal del estudio.
Detectando cambios en los biomarcadores del Alzheimer.
El estudio abarcó una década y 169 participantes en edades comprendidas entre los 45 y 75 años al inicio de la investigación. Cada tres años se sometían a pruebas cognitivas y de neuroimagen además de la extracción de líquido cefalorraquídeo para analizar el estado de los biomarcadores de la enfermedad.
Entre los biomarcadores analizados estuvo la proteína tau,la proteína YKL-40 (que en los últimos tiempos se está identificando como un biomarcador importante) y el amiloide Aβ42, componente fundamental de las placas que provocan el daño neuronal y que también fueron medidas mediante una tomografía por emisión de positrones (PET).
Los análisis demostraron que entre los participantes cognitivamente normales, con edades entre los 45 y 54 años, un descenso en el líquido cefalorraquídeo del amiloide Aβ42 se vincula a la aparición de las placas amiloides años más tarde. Además que la tau y otros biomarcadores de lesión cerebral se incrementan de forma pronunciada en algunas personas cuando llegan a mediados de los 50 años hasta la mitad de los 70 años. La proteína YKL-40 aumentaba a medida que era mayor la edad de los diferentes grupos que se crearon para el estudio.
La presencia del gen APOE4, que aumenta la susceptibilidad a padecer la enfermedad, hacía que los cambios detectados fuesen más acentuados.
Desde MedicaXpress señalan que esta es la primera investigación que identifica los cambios en los biomarcadores a lo largo del tiempo en personas de mediana edad.